El sábado 21 de junio de 2014 se reunieron en torno a 110 voluntarios y autoridades en la Eucaristía de Acción de Gracias del Economato Mª Auxiliadora en la Iglesia de las Escuelas Salesianas de nuestra Casa de Nervión (Sevilla).
Por segundo año consecutivo se quiso realizar un Acto para agradecer a tantas personas que prestan su tiempo, energía, corazón, capacidad…para ir consolidando este Proyecto que como se decía en la Eucaristía “es de Dios “.
Era la segunda vez que Don Santiago Gómez Sierra, Obispo Auxiliar de Sevilla, se encontraba con los voluntarios, que no olvidaban la visita que realizó el 25 de octubre al Economato con motivo de la visita pastoral a la parroquia del Cristo del Perdón.
Junto con D. Santiago concelebró el canónigo de la catedral D. Miguel Oliver. Estuvieron igualmente representantes de las instituciones políticas, económicas y sociales que tanto están ayudando en esta labor social: Consejal y Delegado del Distrito Nervión-San Pablo con su equipo técnico y representantes de la Fundación Cajasol y de la Caixa, del Ateneo y de distintas Cáritas de las Parroquias y de las Hermandades que forman parte de la labor social de este Economato de las Hijas de María Auxiliadora, haciendo vida las palabras de san Lucas: “Dadles vosotros de comer”.
En el ofertorio se presentó un símbolo de una Casa pues, como Casa salesiana que es el Economato, es Casa que Acoge y Casa que Evangeliza ya que, no sólo las más de 490 familias reciben pan, que ya es mucho, sino también unos abrazos que sostienen, una sonrisa que acoge y comparte, una esperanza que lleva el amor de Cristo y la fuerza de su Luz a tantos que a causa de esta crisis han perdido la ilusión.
Don Santiago nos invitó a seguir siendo instrumentos del Amor de Dios precisamente en la víspera de la Solemnidad de la Fiesta del Corpus Christi, porque lo poco o mucho que cada uno es, forma siempre parte de Dios.
En el ofertorio presenciamos la Renovación de los Votos como Hija de María Auxiliadora de Sor María José Cabet, que celebró el 5 de agosto 50 años de Fidelidad a la vocación de servicio y entrega y que quiso compartir esta alegría con todos aquellos con los que día a día hacen realidad este bonito proyecto, esta misión.
Una vez concluida la Eucaristía todos compartimos un almuerzo para poner el broche final a esta magnífica Jornada de Convivencia cuyo brindis fue realizado por el Delegado D. Jaime Ruíz, quien agradeció la labor de tantos voluntarios y se comprometió a seguir prestando todas las ayudas institucionales que sean necesarias para que esta obra social continúe dando vida y esperanzas a tantas familias.
Aún resuenan las palabras de San Pablo: “El pan es uno, y así nosotros, aunque somos muchos, formamos un solo cuerpo, porque comemos todos del mismo pan”.